Hace 2 días, antes de irme a dormir mi mama se me acerca con una cara de preocupación y al preguntarle que le sucede me responde:
"¡ ayúdame! no se que decirle a tu hermanito (quien tiene 7 años), y es que me pregunto; ¿por que eres gay?
... sin mucho pensar le dije solo enseñale a respetar ya que los niños aprenden lo que ven y si tu muestras alguna reacción de preocupación o angustia el relacionara mi orientación homosexual con algo así.
Que dos hombres o dos mujeres se amen como pareja hoy es menos escandaloso que hace treinta años. En el cine, en la televisión y en lugares públicos cada vez es más común ver a parejas de homosexuales demostrando su afecto. El tema se ha hecho tan cotidiano que también es importante explicarlo a los menores de edad, quienes, por lo general toman el asunto con mucha naturalidad, sin estigmatizar, sin la malicia que a veces le imprimen los adultos por mala educación sexual.
Ante el surgimiento del tema ellos podrían preguntar: ¿Cómo se hacen homosexuales las personas? ¿Nacen homosexuales? ¿Pueden casarse, tener hijos?
Así entienden los niños:
Sobre esta materia, los niños son como un lienzo en blanco: para ellos es un tema novedoso al cual, por naturaleza, se acercan sin prejuicios y cuando se les explica no encuentran mayores diferencias con las parejas heterosexuales.
Para comprender esta actitud se puede hacer una analogía con la forma en que entienden a los niños los diferentes colores de los ojos o la diversidad en las formas de las orejas. Lo común es que los demás niños los reciban con normalidad y se acostumbren a compartir y jugar sin estigmatizarlos.
Es por eso que, ante un beso de dos mujeres o dos hombres, podrían tener las mismas dudas que tienen cuando ven un beso en una pareja heterosexual. Si esas prácticas son buenas o malas son temas que los niños no manejan al inicio, a menos de que sus familiares o amigos les compartan e inculquen algunas valoraciones o juicios.
Las valoraciones aparecen cuando ellos reciben algún tipo de influencia de la persona adulta, sea un educador o cuidador que le comenta que la homosexualidad es buena o mala y no solo con la palabra, sus gestos o su desagrado dice mucho a los más pequeños y pequeñas.
Cuando una persona se burla de las conductas homosexuales, hace chistes, imita o ridiculiza por ejemplo, está incentivando una valoración, en este caso, negativa, que calará en los niños negativamente. Y quienes de pequeños o pequeñas se sientan atraidos por personas de su mismo género, sin duda, empezarán a sentirse inadecuados y señalados si expresan sus preferencias. Todas esas conductas los niños las ven y con facilidad las copian.
Para leer el post completo Visita Lo que un gay quiere ver
No hay comentarios:
Publicar un comentario